jueves, diciembre 21, 2006

vida


Sé que mi texto es pretencioso, al menos su título. Es difícil hablar de la vida y no pretendo dar una cátedra. Es sólo que por estos días la palabra a tomado un significado especial para mi.

¿Qué es vivir?. Mientras más pasa el tiempo más creo que nuestro deber en la vida es mucho más que sólo pasar. Tenemos que crear, luchar, repartir lo que aprendemos y escuchar atentos a nuestros maestros. Pero al mismo tiempo tenemos que detenernos cada tanto y reflexionar, salir un poco del torbellino y observar quienes somos, en que estamos y donde queremos llegar.

Se acerca el fin de año, de un año terrible. Para mi, ha sido aprender a dejar ir, darme cuenta que uno puedo crear proyectos, hacerse expectativas, pero entender que no se tiene el control de absolutamente nada. Un día estás y al siguiente no. Yo supuse que eso ya lo sabía, que la muerte de mi primo hace tantos años me había enseñado a vivir el día a día, a no dejar pendientes, a no guardar rencor ni ocultar los cariños; pero una vez más estaba equivocada.

2006, me enseñaste que la vida es frágil y efímera. A veces dura cien años y otras solo un par de segundos. O siete. O sólo un mes. Me demostraste que no es necesario morir para sentir el duelo de alguien que se va, que la partida de los sentimientos a veces es tan feroz como la muerte y, que a veces la muerte no mata los sentimientos. Me obligaste a decir adiós aunque yo no estaba preparada para hacerlo, sólo para mostrarme que tengo la fortaleza para hacerlo. Te odie mucho, te dije año maldito, y todavía lo sigo diciendo. ¿Es necesario tanto dolor para crecer?. Me cuesta conformarme en estos momentos que me siento tan vacía. Tengo miedo de volver a querer aunque mi corazón me lo exija con todas sus fuerzas.

Pero aunque no kiera admitirlo la vida es hermosa. 2006 tengo que ser justa y decirte que por todo lo malo también me entregaste algo bueno. Me diste la oportunidad de reconocer a mis amigos, la buenaventura en mi trabajo y me cruzaste con grandes maestros. Me diste un años más junto a mi familia, para poder apreciarlos a pesar de las diferencias. Y ahora, a pocos días de despedirte, me das la oportunidad de ver a los que tanto me faltan.. mis hermanos y mi sobrinito.

Me diste el regalo de los estudios, que volverán a mi éste 2007. Me das la esperanza k tu sucesor será mejor, porque si algo aprendí es que no todo es malo en la vida. Puedo sonar tonta o ilusa, pero sigo creyendo que algo bueno está detrás de la puerta.